No me considero experto o suficientemente preparado para hablar del movimiento que se está desarrollando en el país en favor de los derechos de las mujeres, siempre he creído que es fundamental el que se garantice la equidad de genero.
Históricamente en las luchas de las minorías siempre se han tenido distintas corrientes, unas más radicales que otras, pero, lo importante es alinear la agenda para obtener avances; de ahí la importancia de buscar las coincidencias entre dichas corrientes. Este próximo fin de semana se conmemorara el día de la mujer, cuyo origen tiene que ver precisamente con cómo se violentaron de manera sistemática los derechos de mujeres a lo largo de la historia y al día siguiente, 9 de marzo se realizará el paro, que espero sea un éxito rotundo, en pro de los derechos y seguridad de la mujer.
Muchos sectores, empresas y grupos se han sumado al paro, pero los más lo que han buscado es obtener un rédito, que no se si consolida o debilita el efecto de la protesta ciudadana; como dije en un principio, no me siento calificado para hablar del movimiento y mucho menos de su agenda o pretensiones; pero en la conquista de las mismas, quiero dejar una reflexión; por que se pueden celebrar marchas y paros pero:
¿Y después qué?
¿Cómo se debe consolidar ese esfuerzo?
¿qué medidas concretas se exigirán para contrarrestar la ola de inseguridad y violación de derechos?
es tiempo de demandar acción con medidas reales y cuantificables para obtener frutos.
Publicado en Twitter por @bruno_eli el 02/03/2020
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