El fin de la imposición de aranceles radica en desincentivar la compra de productos o servicios provenientes del extranjero, por lo tanto, el efecto debería ser disminuir la importación y por ende la economía del productor.
Cuando existen cadenas de valor en un concepto de "world factory", esto tiene un efecto adverso al ser muy difícil el substituir dichas cadenas en el corto plazo, afectando temas como productividad e inflación, sobre todo en el caso del comercio de producto final (ya sean manufacturas, productos agrícolas, etc.); las medidas retaliatorias, se hacen con el fin que mencioné al principio; sin embargo en las guerras comerciales no existe vencedor sino un perder perder.
El dialogo debe ser la mejor solución en todos los casos; pero no tomar las medidas correspondientes hace que una relación de por si asimétrica, se polarice aún mas; en mi opinión la respuesta dogmática de Lopez Obrador a Donald Trump, fue demasiado tibia aún cuando se requería de una mayor fuerza al respecto, aplaudo que se priorice el diálogo, pero en todo caso se debió incluir una postura mas clara respecto a: no solo la mezcla de dos temas completamente ajeos (migración y comercio) sino a las medidas que como país México tomará en el inmediato plazo.
El punto es que no existe respuesta correcta ante tal escenario, sin embargo pienso un poco en lo hecho por China y la Unión Europea ante las amenazas de aranceles que el mismo Trump hizo hace algunos meses, sino mal recuerdo en ambos casos, palabras mas palabras menos, mostraron su postura diciendo que no era buena idea la guerra comercial, sin embargo veían su "mano forzada" por las acciones del gobierno de EEUU; en este caso sabemos que resolver el problema de la migración no es un tema que se pueda resolver en 5 meses, pero si no enfrentas al bully en el patio de la escuela, su abuso no terminará jamas.
Publicado en Twitter por @bruno_eli el 31/05/2019