Un ataque en redes consiste lanzar un ataque desde una cuenta con muchos seguidores, los cuales se refuerzan con mensajes violentos de odio, incluso de acoso y es amplificado por cuentas o bots decenas de veces.
La consecuencia directa es el acoso a la persona que “ataca” y esto representa un acto de censura a la libertad de expresión; a muchos usuarios les ha pasado que por ejemplo su celular no deje de sonar por horas, debido a las notificaciones de Twitter donde se le ataca, denosta, amenaza y desprestigia.
Una agencia con entre 20 y 50 personas puede desarrollar este tipo de logística, pues pueden manejar alrededor de mil 500 usuarios para posicionar contenidos en hashtags en contra o a favor, según el momento y la coyuntura.
La estrategia del gobierno en materia de comunicación, ha sido fallida; Por eso se intenta callar a la oposición a través de este tipo de mecanismos.
Publicado en Twitter por @bruno_eli el 08/04/2020
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