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Foto del escritorBruno Venegas

¿Como se diferencia el discurso público del particular?

Actualizado: 20 may 2020



Este último, se caracteriza por ser una opinión o postura respecto a algún asunto, ya sea del ámbito público o privado, que se limita a la visión individual del asunto, sin tener más injerencia que una simple opinión y no representa más que la agenda personal; adicionalmente, esta opinión esta garantizada por la constitución y sus leyes auxiliares, que avalan la libertad de expresión de los individuos.



En todo caso, la opinión de un particular, por ejemplo un alto ejecutivo de alguna compañía pública, podría afectar su valuación en bolsa, debido a la percepción o recepción que tenga el inversionista de esa opinión; pero en todo caso esa repercusión sería exclusivamente en el ámbito privado, sin reflejarse forzosamente en la vida pública. ¿Pero que pasa con el discurso público? en esta magnífica referencia histórica de Pascal Beltrán del Rio se entiende las consecuencias posibles y evidentes del efecto que puede tener el dicho de un funcionario público, tanto en la vida pública como en la privada.



Recuerdo que hace algunos años Alan Greenspan, 19 años presidente de la FED, tenía el poder de mover los mercados con tan solo externar su opinión, en la actualidad Trump con un tweet puede ocasionar serias afectaciones a los mercados y perspectivas económicas y políticas, en otro ejemplo reciente,

López Obrador causó un daño patrimonial a Grupo Carso al decir que Carlos Slim se iba a retirar; así también hemos visto como Jaime Serra Puche al anunciar las medidas que tomaría el gobierno de E. Zedillo provocó el éxodo de capitales de inversión en '94, también a lo largo de este gobierno (que ha manifestado su falta de habilidad política), se ha afectado a grandes sectores por la carente probidad en sus declaraciones, como ejemplo esta el sector financiero con el tema de las comisiones bancarias.


Como podemos ver, el discurso político tiene la característica de no solo afectar la vida privada, sino la forma en la que interactuamos en la arena pública, hace algunos días escribí acerca de los elementos que utiliza en la comunicación y los rasgos en la gobernación vigentes en la presente administración; el lenguaje confrontacional y la contranarrativa se ven plagadas de claroscuros que tergiversan la percepción.



El ejecutivo ha apelado en varias ocasiones al derecho de replica que, constitucionalmente es un derecho, sin embargo la Suprema Corte de Justicia de la Nación emitió una tesis respecto a las limitantes a dicho derecho de replica, donde en resumen solo se puede apelar al mismo en caso de que la critica periodística se base en información falsa o inexacta, donde solo se podría rebatir esa porción de la opinión.



Pero regresando al asunto del discurso público, es imperante que las autoridades en general sean cautelosas en su política de comunicación social, ya que estas siempre tendrán un efecto ya sea en la vida publica, privada o la percepción de la ciudadanía, cuando escuchamos a las autoridades, debemos suponer que están diciendo la verdad y que las cifras en reportes oficiales y el discurso público deberían ser congruentes, el discurso político tiende a convertirse en acción gubernamental y política pública; como dice Pascal Beltrán del Rio, un dicho o un deseo del gobernante tiene el riesgo de ser tomado como una orden ejecutiva. Hoy en día, desafortunadamente, México (y varios países) vivimos en el mundo de las posverdad, donde nuestros gobernantes, en lugar de exacervar la realidad y la congruencia, buscan su popularidad y aceptación en respuestas emocionales de sus seguidores, supeditando la realidad a la percepción y es entonces que el discurso publico beligerante y confrontacional genera la segregación de grupos discordantes y el ataque sistemático entre las fracciones antagonistas.



Escuchar al ejecutivo y congresistas demandar tal o cual cosa, solo debilita el estado de derecho y tiene como efecto, como dije en mis reflexiones anteriores, el consolidar el poder, demostrar fuerza a base de golpes de autoridad, identificar y crear adversarios y desmantelar instituciones.


Publicado en Twitter por @Bruno_eli el 18/06/2019


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